Antecedentes Historicos de Mapimí

--> -->

Antecedentes históricos.

Los hallazgos aislados de puntas de proyectiles primitivos, utilizadas para cazar hoy extintos, mamíferoscomo el mamut, bisonte, caballo ancestral americano, camelidos y otros, prueban que el hombre poblada ya el bolsón de Mapimí y áreas vecinas desde hace doce o quince mil años.

Los indígenas del Bolsón de Mapimí dejaron numerosos ejemplos de su arte rupestre como pinturas y grabados sobre las rocas en sitios agestres de la sierra donde habitaron temporalmente o donde se congregaban para sus ritos y ceremonias entre gran numero de pueblos primitivos del mundo. Habiendo pruebas de de estas pinturas en el cerro de “La Bufa” o “La India” en la Ciudad de Mapimí.

Sus fundadores fueron el jesuita Agustín de Espinoza y los Tlaxcaltecas que lo acompañaban en su labor misionera por tierras laguneras. Esta misión la respaldaba el capitán Antón Martín Zapata con algunos soldados que protegían a los religiosos de los constantes ataques de los naturales: Irritilas, Tobosos y Cocoyomes, entre otros de los grupos que vivían diseminados en la Comarca lagunera.

El nombre de Mapimí proviene del autóctono Cocoyome- Mapemé que significa "Peña Elevada". La población levanta a poca distancia al norte de la sierra del mismo nombre y desde sus calles pueden verse perfectamente los agudos perfiles de roca. La majestuosa sierra de Mapimí recorta el perfil de un indio boca arriba; otros dicen que es el rostro de una india bonita. El común de la gente se refiere a esta sierra con el nombre de "La Bufa" o "La India".

Se funda Mapimí el 25 de julio de 1598, sus primeros habitantes levantaron chozas y mas tarde unas incipientes construcciones de adobe y piedra. Los Tlaxcaltecas eran diestros en el tallado de canteras y artísticos dinteles. En el centro del congloromerado no podía faltar una iglesia sede de una nueva parroquia donde se oficiaron las primeras misas.

Desde su fundación hasta las primeras décadas del Siglo XVII, Mapimí hubo de resistir los ataques de los indios. Las más feroz de las embestidas indígenas contra la población fue el fatídico Jueves Santo de 1715: muchos hombres y mujeres fueron pasados a cuchillo, la ciudad fue saqueada e incendiada, en el ataque fue destruida también la parroquia de Santo Santiago Apóstol, se dijo que los atacantes fueron Tobosos y Cocoyomes y que en la refriega murieron poco mas de 100 españoles y cerca de 300 criollos, contando niños y mujeres, esa tarde durante un paseo del famoso Señor de Mapimi, los creyentes lo escondieron en unos matorrales para que no cayera en manos de los atacantes, de ahí se origino la leyenda del Señor de Mapimí ya que unos arrieros encontraron el crucifijo y lo llevaron al vecino poblado de Cuencamé, que era el destino de su viaje donde lo entregaron al señor párroco, por esta razón se celebra el Señor de Mapimí en la ciudad de Cuencamé.

Hasta el año 1764 se reconstruyo la parroquia de Santo Santiago Apóstol, con la edificación que tienen en la actualidad.